La realidad deja sin palabras a las propagandas. Cuando la VERDAD se manifiesta, los falaces eslóganes publicitarios se esfuman, se desvanecen en el aire contundente de lo concreto y palpable.
Hoy las tarifas de servicios más elementales están amenazando la subsistencia de miles de clubes y entidades barriales sin fines de lucro, que cumplen una insustituible función social. Los mismísimos Bomberos Voluntarios NO pueden afrontar el pago del servicio eléctrico. Los bomberos que arriesgan su vida VOLUNTARIAMENTE sin percibir un solo centavo por su altruista obra de amor al prójimo, se encuentran amenazados de no poder seguir cumpliendo su generosa labor, por NO poder pagar luz y gas.
En el hermoso y esplendoroso sur argentino existe una característica singular siempre presente: el frio. Hasta en los veranos más contundentes las bajas temperaturas se hacen presentes. El gas es el combustible irremplazable para abrigar casas, escuelas y demás públicos edificios. Las tarifas descomunales son imposibles de pagar.
La ciudad de Bariloche, con su intendente a la cabeza, se manifiesta en las calles pidiendo que se reconsideren estas brutales subas de servicios. El intendente de la ciudad, Gustavo Gennuso, llamó a no pagar las insólitas facturas de gas, muchísimas de las cuales acusan un 2500% de incremento.
Los gobernadores de todas las provincias patagónicas pidieron en formal reunión con el gobierno nacional que retrotraigan estos salvajes ajustes.
Mucho más cerca de nosotros, nuestros propios vecinos NO pueden cumplir con el pago de los servicios por NO contar con el dinero suficiente para “llegar” a estas elevadas tarifas.
Un grupo de intendentes bonaerenses luego de exponer las dolorosas dificultades de sus representados ante autoridades nacionales, por no poder hacer frente al “tarifazo”, comenzaron a presentar sendos recursos de amparos para que la justicia salga a brindar un marco de sensatez donde el gobierno de Macri niega su presencia.
Gustavo Menéndez, intendente de Merlo, Walter Festa de Moreno, junto a otros alcaldes se vieron forzados a recurrir a la justicia en su afán de proteger a sus comunidades municipales, que se ven acorraladas por facturas confiscatorias. Aún el gobierno de Macri y el de Vidal parecen no tomar conciencia de la extrema gravedad social que estamos comenzando transitar ¡Es una angustiante contrariedad social con final abierto!
Uno de los municipios de nuestra provincia, más concretamente el de San Martín, abonaba de luz eléctrica 400.000$. La nueva tarifa elevó este costo a 2.100.000$ dicho esto por su propio intendente, Gabriel Katopodis.
Claro, el problema se agrava en las pequeñas y medianas empresas que no alcanzan a sortear este descomunal aumento ¿Quién paga lo que no puede? ¿Cómo obtenemos agua en un ardiente desierto? ¿Cómo hacemos para encontrar sentido común y solidaridad en aquellos que desconocen las necesidades de los pobres?
¿Se aproxima una avalancha de amparos? ¿Dónde se establecerá una “línea de corte” a este despropósito inflacionario con recesión?
Muchas promesas y nada de mejoras concretas para la población humilde y trabajadora.
¿Será este gobierno un “cambiemos” para peor?
Máximo Luppino
Tweet |
0 comentarios:
Publicar un comentario