Pertenecer

     Por Alfredo Sayus

En los tiempos de la plata dulce y del engaño de “un peso igual a un dólar”, un banco promocionaba sus servicios diciendo que “Pertenecer tiene sus beneficios”. Por supuesto, hablaba de pertenecer a las altas posibilidades financieras, a las que sólo acceden quienes tienen un alto poder adquisitivo.

Casi como una pregunta sociológica muchos integrantes de los sectores medios de la sociedad intentaban entender por qué los pobres, los que viven en casas paupérrimas, sin piso y, a veces, sin acceso a servicios públicos básicos compran celulares caros, zapatillas caras, ropa deportiva cara, equipos de audio ostentosos, situación que indigna a esos sectores medios ante el intento del pobrerío de “querer parecerse a nosotros”.

Aquí se bifurcan las respuestas: 1) Adquirir estos bienes de consumo caros los emparenta, de alguna manera, con la idea de pertenecer. 2) Las políticas de gobierno del FpV permitieron que los sectores más vulnerables accedieran a esos bienes y ya no importa tanto la idea de pertenecer porque todos tenemos acceso a lo mismo.

Ambas situaciones molestan a los sectores de alto poder adquisitivo. Todos esto lo sabemos sobradamente ¿Cuál es el tema en cuestión, entonces?

En declaraciones públicas, Daniel Scioli dijo que cuando accedemos a aquello que anhelamos, queremos más cosas. Eso es la naturaleza humana. Aquellos sectores postergados que en estos doce años accedieron a lo que, casi siempre, les fue negado es lógico que quieran tener más cosas.

Y aquí viene el tema en cuestión y el engaño al que están siendo llevados: La hábil campaña de la alianza derechista Cambiemos les hizo creer a millones de argentinos que, ahora, pertenecer es ser como Macri. “Si gana Macri todos seremos como él”, sería el mensaje entre líneas.

Vendría a ser un “Si ya pertenecemos, ahora pertenezcamos a la alta burguesía, al capital concentrado, a los sectores que nunca pierden aunque el país se hunda”.

Pertenecer tiene sus privilegios, pero si sólo se privilegia un grupito en detrimento de la mayoría del pueblo, prefiero no pertenecer.

Tweet