PABLO SIRVÉN, RACISMO ANACRÓNICO

martes, 19 de enero de 2021

"La madre de todas las batallas", artículo periodístico editorial del diario La Nación donde Sirvén califica a la provincia de Buenos Aires como "ese territorio inviable en cuyo africanizado conurbano se deciden electoralmente los destinos de la Patria".



Para un desconcertante Pablo Sirvén, África “es culpable” de ser explotada por la desmedida ambición imperialista de algunos países. Pero lo más preocupante es su sentido racial profundamente discriminador en el que “negro” es inferior, inviable, inconveniente políticamente hablando. Decimos esto por no ser rotundos y afirmar que para este “periodista” raza negra es mala, etnia blanca es buena y superior… Además de generar una profunda indignación, es este un pensamiento muy preocupante ya que está emparentado con un sentimiento tan maligno y sectorial como la “filosofía” nazi de la criminal “solución final”  

Siguiendo los cavernícolas sentimientos de Pablo Sirvén, nos sugiere pensar que avalaría al Ku Klux Klan que fomentaba la supremacía de la raza blanca atacando personas de raza negra, judíos y naturales de los EEUU, llegando a matar en la horca o la hoguera a personas de color de su Nación.

 El señor Sirvén soñara con un África rubia, tan rubia como la del apartheid que separaba racialmente a la población del continente y se imponía por el uso de la violencia homicida hacia las personas de raza negra. 

No nos ofende a los bonaerenses por emparentarnos con africanos, molesta sí la intencionalidad de menospreciar la profunda argentinidad de nuestro suelo criollo, cuna de una provinciana cultura orgullosa de ser argentina.   

Sirvén se encuentra alejado de la luz de nuestra gloriosa bandera y de los valores que representa. El General José de San Martín conformó ejércitos libertadores, no invasores. No deseaba colocar cadenas a los pueblos ni arrebatarles sus riquezas. El Gran Capitán deseaba la libertad y la felicidad de los pueblos de América.  

Aquel individuo que no ama su terruño se encuentra divorciado del divino orden natural. Sufre un ostracismo autoimpuesto por su sentido de separación de sus conciudadanos por propia ignorancia espiritual. 

Debemos convenir en que los pensamientos como los que esgrime Pablo Sirvén nos muestran claramente la existencia del sentir antipopular: fobia crónica a la Argentina en la que reside físicamente, ya que su corazón habita en naciones de gringo pensar. Rechazamos enérgicamente el oscuro corazón del periodista Sirvén. Se trata de un intelecto triste que reside en las cavernas de ideas caníbales, un ser herido por dentro, un ignorante de la belleza que reside en nuestros semejantes más allá de su color de piel, de su raza o el pensamiento particular que esgriman. 

Terminaremos recordando un fragmento de “Fuego en Animaná” de Cesar Isella:

“Si yo me voy conmigo ira

Todo lo que soy lejos

De aquí lejos de mi

Yo no seré yo


Déjenme estar de solo

Estar viendo el sol nacer

Yo quiero ver en mí

País el amanecer…”

Lea las verdades de esta canción, Pablo Sirvén. Escuche sus compases, abra su espíritu al SOL de la igualdad entre los hombres, señor. Así usted será una persona feliz y comenzará a AMAR al semejante como a sí mismo…

    Máximo Luppino


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